Tal y como dije la semana pasada, esperaba que la siguiente crónica fuera de color blanco y así va a ser. Ayer sábado, Rafa y yo fuimos a Somport para ver qué se cocía por esos alrededores, con los esquís en el coche. Después de las nevadas de estos últimos días esperábamos que quedase algo de nieve para quitarnos el mono y así fue. No había una gran capa de nieve y cada 30m había algún riachuelo de agua, pero ¿qué más se puede pedir un 14 de noviembre?Nada más llegar a Somport vimos a la ilustre Pilar Buzunariz patinando y compartimos algunas palabras con ella. Nos contó que el lunes hubo una gran nevada de unos 70cm y Bruno pasó la máquina para ir haciendo una capa, de manera que los locales pudieron gozar de una auténtica esquiada invernal, pero el miércoles comenzó a jarrear y poco a poco esa nieve fue derritiéndose... ¡¡Habrá que seguir esperando a otra nevada!!
Josu
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